Hoy en día para lograr un crecimiento en nuestras ventas es necesario contar con una política de seguimiento del mercado, segmentación del cliente, conocer a los clientes, sus hábitos de compra, sus perfiles, sus necesidades, etc.
Cada vez se hace más necesario contar con un soporte tecnológico, que permita automatizar nuestra fuerza de ventas, políticas de marketing, gestión de la cadena de logística, etc. Una posible solución se encuentra en las nuevas plataformas tecnológicas (CRM, SCM,..). Se trata del desarrollo de un software a medida, donde quedan registrados todos los datos de interés para que las empresas puedan desarrollar procesos, relaciones y comportamientos que den soporte a toda la organización hacia los clientes.
Para conseguir estos objetivos se debe realizar una gestión innovadora en la empresa, enfocada a la creación de valor a los clientes y con un tratamiento muy especial sobre los activos intangibles de la empresa, que constituyen el capital intelectual de nuestra empresa y los cuales pasamos a enumerar:
1.- Los empleados. Aprovechar su conocimiento, habilidades, experiencias, creatividad, imaginación, capacidad de trabajo en equipo, etc., de forma que pueda convertirse en un activo propiedad de la empresa a través de acciones que permitan conservar su conocimiento a través de la codificación en bases de datos, manuales, etc. esto hoy en día es mas factible de realizar gracias a las nuevas tecnologías de la información.
Los beneficios que conllevan una adecuada gestión de este activo intangible se pueden conseguir a través del siguiente modelo: Unos empleados motivados, implicados, formados y satisfechos con la empresa, condición indispensable, ya que si a un empleado no se le valora con hechos, será reacio a compartir su conocimiento con la empresa y si no se dan estos condicionantes utilizaran sus conocimientos como arma para defender su posición y ventajas en el trabajo.
Esta política de gestión de los recursos humanos debe ir acompañada de un soporte tecnológico que permita compartir información entre los miembros de la organización, lo que dará un mayor conocimiento del mercado, la política de marketing más adecuada en cada momento, lo que a su vez se traducirá en aportar un mayor valor hacia los clientes, con lo que se conseguirá una mayor fidelización y satisfacción de estos, lo que a su vez dará un impulso en las ventas, aumento del beneficio y por consiguiente un crecimiento en la empresa.